El primer tema que quiero tocar es cómo estás alimentando tu mente ¿Por qué por qué metí este tema como el primero?
Si tienes ansiedad, si tienes depresión, lo primero que tienes que empezar a estar atento es en cómo estás alimentando tu mente y por qué les digo esto, actualmente todos somos ya parte de una sociedad digital y todos estamos inmersos en las redes sociales en Facebook, Twitter, Instagram, en YouTube viendo distintos vídeos o estás en Netflix viendo películas y todo aquello que disfrutamos del internet.
También puede que estés dentro de las redes sociales buscando apoyo, por ejemplo, yo comencé esta emisión en vídeos en unos grupos privados de Facebook que siguen existiendo y en los cuales las personas hacen comentarios diciendo que ya tuvieron 20 mil síntomas y que están espantados, aunque eso no es lo malo, afecta la salud mental de las personas que los leen, se convierte en un espacio digital en el cual se ‘contagian’ de todas sus emociones y pensamientos negativos sin aportarse realmente de manera positiva y enriquecedora.
Te explico un poco más con un ejemplo personal…
Cuando estaba en los momentos más altos de mi ansiedad había información que me ponía mal (nervioso, miedoso, triste, enojado, estresado, confundido etc) y cuando me di cuenta de esto hice un experimento:
Pensé “Ok, acepto conscientemente que en estos momentos soy sensible, voy a investigar a que informaciones soy sensible, no la voy a consumir”
Es como si sabes que eres alérgico a la nuez, vas a la panadería y te pides un pastel hecho de mil nueces, obviamente suena absurdo e ilógico.
Por lo cual te recomiendo identificar qué información no te hace bien consumir ahorita si te estás enfrentando a la ansiedad. Tu sistema nervioso está alterado, no te pongas a ver “The Walking Dead” una serie súper en la cual hacen que te claves con la historia porque está bien construida, no te pongas a ver “Anabel” o NO te pongas a escuchar las noticias todas las mañanas en donde sabemos que hay delincuencia, que hay asaltos, que hay muertes lamentablemente, pero para qué quieres saberlo más.
Cambia el chip desde este momento y también cambia el hábito, tienes que sembrarte un hábito de verdaderamente querer cambiar y aceptar que no solamente son ‘las ganas’, no nada más basta con querer cambiar, tienes que sacrificar cosas, tienes que estar dispuesto(a) a ‘pagar el precio’
Y si dices bueno es que si tengo ganas pero la verdad prefiero estar todo el domingo viendo YouTube, viendo Werevertumorro – que es muy bueno para el entretenimiento pero que es entretenimiento y no es lo que necesitas ahorita – o lo que prefieres es estar simplemente haciendo nada, identifica que estás en una situación, no te recomiendo darte el lujo de tener vacaciones mentales, porque por dentro estás en crisis, traes una ‘batalla’ con tus emociones, tus pensamientos, tus acciones y tus resultados.
¡OJO! No se trata de esclavizarte
Se trata de tener compromisos, de tener disciplina, de amarte, de hacer ese cambio con las bases y bajo el amor.
Es muy difícil cambiar si sigues con la misma información, para mí fue un parteaguas importante comenzar a buscar información que me ayudara, que me entrenara, porque obviamente la información que ya estaba en mi mente desde que nací hasta ese momento no me había funcionado. De ahí también la importancia de poner en práctica estos consejos.
En conclusión…
Te invito a ser consciente de este tema, a cuidar más tu mente y alimentarla de mejor manera, finalmente nadie piensa en tu cabeza más que tú mismo, tu misma, si decides consumir buena información lo reflejarás en tu manera de ser y de vivir.
¡Recuerda!
‘La ansiedad no te destruye, te transforma’ Aarón Ipac
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Episodio ‘¿Cómo estás alimentando tu mente?’ en mi podcast ‘Ansiedad y Depresión mis Mejores Maestros’
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Escrito por Aarón Ipac
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